No es novedad que la internet hizo un cambio radical en la música, dejándola
en crisis por más de una década. Para bien o para mal, logró democratizar y
hacer que cualquiera pudiera crear y grabar su material y así subirlo a alguna
plataforma como soundcloud o youtube, y en ocasiones, hacerse conocido.
Esto facilitó la piratería, dejando a un click una gran cantidad de contenido.
Con el afán impedir el robo de derechos de autor, aparecieron los servicios de
Streaming, pero a un costo. Hoy en día esto representa un 47% de los ingresos
a nivel mundial, reviviendo a una industria que se vio estancada debido las
descargas ilegales.

Gracias a esto, nace en el 2006 una aplicación de origen sueca llamada,
Spotify, siendo estrenada oficialmente el 2008. De varios años vienen
consolidándose como la empresa por excelencia a la hora de escuchar música,
albergando una gran cantidad de artistas en su repertorio.
Sin embargo, no ha estado exenta de polémica. Spotify tuvo ingresos de
aproximadamente 2 mil millones de dólares, con un aumento de un 22% en
comparación al primer trimestre del 2019, según cifras que entrega anualmente
la compañía.
El pago que recibe cada artista es entre $0,006 y $0,0084 USD
1667
Reproducciones
Reproducciones de usuarios para generar ganancias al titular*
10$
USD
Ganancias a repartir entre las partes involucradas en el trabajo
Sello
Change the color to match your brand or vision.
Productores
Change the color to match your brand or vision.
Compositores
Change the color to match your brand or vision.
Músicos
Change the color to match your brand or vision.
Free o Premium importa.
El pago que recibe cada artista es entre $0,006 y $0,0084 por reproducción al “titular”, considerando que este concepto incluye al sello, productores, compositores e intérpretes, agregando más personas cuando se trata de una agrupación.
Por otra parte, cabe destacar que los ingresos dependen de qué tipo de cuenta provenga la escucha, haciendo notables diferencias entre la reproducción de una cuenta premium y una gratuita. Cuanto más son las escuchas desde cuentas pagadas, mayores son las regalías que se reciben.
Esto ha generado resquemores incluso en compositores de talla mundial como la cantante, Taylor Swift, quien declaró el año 2014, tras sacar todo su catálogo de Spotify, “
No estoy dispuesta a contribuir el trabajo de mi vida a un experimento que no siento que compensa justamente a los escritores, productores, artistas y creadores de esta música”
. Más tarde, esta acción que a muchos les pareció arriesgada, le dio la razón a la estadounidense, siendo una de las intérpretes de mayores ingresos hasta la fecha.
#supportartists
Apoya a tus artistas favorit@s
Esta distribución monetaria, afecta principalmente a los emergentes, que, a pesar de no recibir una buena cantidad de ingresos, optan por los suecos ya que actualmente es la que tiene mayor alcance, sobre sus competidores directos, como apple music, Google music y deezer.

Una opinion interesante
Portal Disc
Según palabras de Sebastián Milos, presidente de la página web, Portal Disc, exclusiva de contenido nacional, “A nivel usuario, estas plataformas son increíbles, dando posibilidad de crear playlists, ofrecen muchas posibilidades, pero en cambio a nivel aristas tiene sus puntos que uno podría criticar, son super impersonales, los músicos chilenos por ejemplo no tienen el contacto directo con Spotify para planificar alguna acción, alguna promoción, tiene que ser siempre por distribución”, agregando que…
“Ahora recién en estos últimos tres años se consolidó claramente lo digital como la única forma de seguir adelante, y como que los artistas y los sellos están soltando un poco el formato físico, enfocándose netamente en lo digital”
#Triste pero cierto
Spotify no es un buen elemento cuando se intenta vivir de la música
Si bien Spotify no es un buen elemento cuando se intenta vivir de la música, y poder recibir un sueldo mínimo en chile deben ser más de 100 mil reproducciones, si sirve al momento de difundir material. Para esto, los artistas deben recurrir a un distribuidor. Estas empresas funcionan como intermediarios entre el artista y las compañías de straming, permitiendo publicar y posteriormente cobrar las regalías, quedándose con un pequeño porcentaje correspondiente al cobro.
Esto provoca que para el músico que parte y no conoce esta forma de entrar, le va a ser mucho más difícil, ya que las distribuidoras también se preocupan de tratar de publicitar lo más posible a sus clientes, incluyéndolos generalmente en playlist.
#Testimonios
Nicolas Nazar, integrante de la banda emergente, Hijos de ladrón, nos comentaque:“Tuvimos la suerte que desde nuestro primer single pudimos ser
presentados personalmente con la distribuidora, y eso nos ayudó mucho, pero en el caso de artistas que van de manera independiente, yo creo que es muy castigador, son muchas las empresas que están tratando de poner susproductos en vitrina“
A pesar de los problemas, pareciera que esta nueva revitalización del negocio
de la música todavía esta una etapa beta, siendo poco amigable en términos
económicos. Todavía queda ver cómo evoluciona esta nueva forma de generar
ingresos y cómo logra suplantar lo que alguna vez fue la venta del formato
físico, como discos, casetes y vinilos.


Propuesta Nacional
En Chile al menos, podemos apreciar proyectos como el ya mencionado anteriormente, Portal disc, preocupados de incentivar y apoyar el contenido chileno, habilitando la opción de donar a los músicos que en época de pandemia se ven en una difícil situación debido a la cancelación masiva de espectáculos, y cabe destacar que dentro de las próximas semanas esta por estrenar la nueva aplicación de streaming “Suena Chile”, enfocada exclusivamente al producto nacional.